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Testimonios de nuestro primer Proyecto 2016

Belen Maccarini

Voluntaria, Argentina

El encuentro con otra personas nos permite “re-descubrirnos”, hermosa sensación de “re-vivir” que nos llena de asombro al reconocernos en una nueva mirada...Y sí! Hay muchas cosas que “re- descubrí” en este hermoso voluntariado.

Re-descubrí que conceptos tan abstractos y teóricos como “metodologías participativas”, “sinergia”, “CANVAS”, “sustentabilidad” solo tienen sentido cuando abrimos el corazón, el espíritu y la mente, a compartir y crear con otros. Pero abrirse no es fácil, se requiere de mucho coraje y amor, porque nos exponemos…¿A que nos exponemos? ¿A cambiar?

Y si! Solo cuando cambiamos junto con el otro, toma sentido y tiene vida cada concepto y cada idea.

 “Viví” que las “metodologías participativas” requieren de mentes y corazones abiertos a todas y todos…niños, jóvenes, adultos; organizaciones, compañeras, participantes, comunidades...pero sobre todo, los nuestros.

 “Viví” que las “sinergias” sólo son posibles cuando respetamos a la otra persona con sus saberes, sus tiempos, sus prioridades; respetamos  su entorno social, cultural y ambiental. Y también, nos respetamos a nosotras con nuestros saberes, nuestra cultura, nuestros temores y nuestros deseos.

“Viví” que el “CANVAS” va tomando color cuando cada artesana, tallerista y organización “re-descubríamos” saberes en cada pieza del rompecabezas; solo allí esa pieza conceptual, se llenaba de sentido y vida.

“Viví” que la “sustentabilidad” es un concepto nuevo, con miles de millones de años de historia vivida…que las comunidades llevan en sus venas y practican a diario; y de las cuales tenemos tanto que aprender.

Agradezco a la vida y a cada persona que conforman “Mujeres en Acción”, Hunab, comunidades de Tizimín, y a quienes apoyaron este proyecto desde innumerables lugares y formas; por permitirme “VIVIR” cada una de estas ideas y “re- construirlas” junto a otras/os.

FELIZ y AGRADECIDA por la sonrisa de cada mujer de este “viaje”, que me recuerdan que: “Si una mujer se mueve, el mundo se mueve con ella”.

Norma Beltrán T.

Voluntaria, Perú

Acabo de reintegrarme a mis labores diarias después de esta experiencia maravillosa con las comunidades de Tizimín, lugar en el que me sentí como en casa, compartiendo con mujeres madres emprendedoras y con sus pequeños hijos para quienes ellas desean en base a sus emprendimientos productivos, construir un futuro mejor.

Esta experiencia con las mujeres madres, me hizo valorar aún más la importancia de saber que a pesar de las circunstancias o en contra de todo pronóstico, si uno se entrega en lo que hace con el corazón, siempre se puede dar y hacer mucho más por los demás.

Cada una de nosotras compartió lo mejor de sí  y tuvimos el espacio abierto para SER, desde nuestra diversidad cultural, llegamos y fuimos recibidas con los brazos abiertos por mujeres maravillosas que conservan y atesoran su cultura ancestral y de la cual nos permitieron conocer y compartir por algunos días; aunque me hubiera gustado que sean muchos más…

Me llevo el mejor de los recuerdos, de las mujeres madres, que día a día van atrapando sueños en cada una de las artesanías que elaboran, sueños de una mejor vida para su familia y sueños de una comunidad próspera en armonía con el ambiente.

Gracias a cada una de las personas e instituciones que hicieron posible el cristalizar este proyecto de voluntariado internacional Mujeres en Acción. Me siento inmensamente feliz de haber vivido esos días de los cuales tengo los mejores recuerdos y no puedo estar más agradecida ya que he recibido tantos abrazos sentidos como para los días que aún me quedan por vivir… Gracias por todo!

Mariza Soares

Voluntaria, Brasil

Muchas veces no alcanzamos comprender nuestra misión en el mundo! A veces nos encontramos perdidos en nuestras creencias limitadas. La mayoría del tiempo inmersos en nuestro ego. A veces ahogados por nuestra perspectiva estricta del éxito y felicidad. Hay que tener coraje para mirarse por dentro y reconocer sus sombras y solamente cuando las reconocemos tenemos la oportunidad de cambiar en luz lo que ofusca nuestra existencia.

Si nos colocarmos delante de la diferencia y nos permitimos cambiar de piel por algunos instantes podemos generar una inmensa evolución en el proceso de desarrollo humano.

Frente a tantas dificultades que encontré en los poblados de Tizimin, México, también encontré personas felices, llenas de luz y con una fuerza de voluntad que ha hecho renovar mis esperanzas, que me hace creer que no importa el tamaño del trabajo que hacemos sino el impacto que causamos y la diferencia que hacemos en la vida de los que cruzan nuestro camino. La evolución es un camino largo e infinito pero es también reconociendo nuestras acciones que se puede seguir avanzando. El ejercicio cotidiano de poner amor en todo lo que se hace, mientras no sea lo que se gusta o se quiera hacer, torna la vida más ligera y bella.

Shirley Pazos Bashualdo

Voluntaria, Perú

Pocas cosas en la vida son tan gratificantes como reír y amar, lo primero puede que sea más fácil pero pocas veces se hace siempre, y amar aunque parezca más difícil es cuestión de dejarse llevar y sentir. La lágrimas espontáneas al finalizar el trabajo en Rancho Grande no fueron más que muestras de gratitud por el amor recibido y dado, aprendí muchas cosas con el grupo, desde la preparación de tortillas hasta el elaborado proceso de las artesanías en base a caracol maya, pero sobre todo reforcé que el amor es igual siempre y en todo lugar, una comida especial, una sonrisa, un abrazo, una flor, una cartita,  un gracias! En Rancho Grande y San Arturo hay mucho amor esperando por alguien, y es ese amor el que ofrecen en sus artesanías, son gente con un alma tan pura, un espíritu emprendedor, una fuerza que sale del corazón y de risa fácil ante cualquier circunstancia que no enamorarse de ellos es imposible!

Así como el amor, creer y confiar a veces es duro, en estos días he comprobado que creyendo y confiando todo es más llevadero, creer que puedes llegar a la meta y confiar en ti misma y en el equipo. Es bueno sentirte segura de que no te vas a ahogar porque traes un chaleco, pero es mucho mejor sentirte confiada de que vas a llegar a la meta porque hay alguien con muchas habilidades y muy capaz a tu lado, capaz de enseñarte a flotar, capaz de impulsarte para avanzar, capaz de remolcarte cuando te quedas parada, y sobre todo capaz de hacerte el trayecto mucho más feliz, esas son para mí las Mujeres en Acción! 

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